Foto por Michael Hindman. Sony α7R III. Sony 16-35mm f/2.8 G Master. 1/2 seg., f/5.6, ISO 100
Aunque para Michael Hindman (@michaelhfoto) la fotografía nunca ha sido su carrera, siempre ha sido una salida creativa que lo ha inspirado personal y profesionalmente. En los últimos 16 años, la carrera de Hindman como diseñador ha abarcado agencias de publicidad, dos compañías tecnológicas en ascenso, hasta cofundar actualmente una empresa con dos amigos y, a través de todo, se ha encontrado sumergiéndose de nuevo en la fotografía, ya sea contratando fotógrafos para realizar trabajos de diseño o tomando una cámara él mismo para experimentar con retratos o para fotografiar una boda. Hindman también es un ávido fotógrafo de paisajes y naturaleza, aplicando sus sensibilidades de diseño a las vistas escénicas. Nos conectamos con él para obtener más información sobre cómo hizo esta foto de colores brillantes y de ricas texturas en Utah. Uno de los factores más importantes en la fotografía de paisajes es estar en el lugar correcto en el momento adecuado. Vea cómo Hindman labró su suerte a través de la preparación para capturar esta hermosa escena.
Hace siete años encontré mi pasión por la fotografía de paisajes y he dedicado mi tiempo libre a mejorar mi oficio y tratar de encontrar mi propia voz en un espacio lleno de gente. Mi trabajo ha sido reconocido recientemente por Outdoor Photographer Magazine, Epson Pano Awards, International Landscape Photographer y Popular Photographer Magazine.
Aprendí con equipos Nikon, y pensé que siempre iba a ser un usuario de por vida. Pero en un reciente viaje al Valle de la Muerte con un amigo, tuve la oportunidad de jugar con su Sony α7R II y me enganché al instante. En particular, las funciones de enfoque, la vista previa de la imagen del visor y la configuración más pequeña y ligera ofrecen una experiencia de usuario superior. Desde entonces me he convertido en fotógrafo Sony con la α7R III y no he mirado hacia atrás.
Cómo hizo la toma
Cada invierno paso algún tiempo viajando y fotografiando el desierto, en el camino tanto de ida como de vuelta a casa de mis padres para las vacaciones. Estaba planeando mi viaje de regreso a casa este año para que fuera estrictamente en automóvil, ya que tenía un cachorro de 4 meses a bordo. Sin embargo, mientras estaba estacionado por la noche en mi camper en Utah, tomé la decisión de último minuto de llevar a Rocky, mi Mini Aussi de cuatro meses a una caminata temprano en la mañana para que gastara energía por el resto del viaje. Encontré un sendero que admite mascotas que terminaba en un mirador del cañón. Nunca había estado en este lugar antes y no tenía idea de qué esperar.
Rocky y yo salimos en la oscuridad y nos abrimos camino a través de la subida de tres kilómetros y medio, encontrándonos en lo que sabía que era la cornisa sobre el mirador, pero no podíamos ver la vista que teníamos por delante. Pude ver las luces de la ciudad a lo lejos y configurar mi equipo mientras me aferraba firmemente a la correa de Rocky tratando de mantener a mi curioso cachorro a salvo y lejos de mi trípode.
Con el crepúsculo sobre nosotros, finalmente pude distinguir la vista frente a nosotros. El cañón era aún más bonito de lo que esperaba y preparó el escenario para lo que estaba por venir. Mientras exploraba el área en Google Earth la noche anterior, sentí que este mirador podría contener características de composición que busco en las imágenes, incluidas las líneas principales.
Cuando la luz subió y pude ver el cañón, de hecho comencé a ver esas líneas en el marco. Rápidamente busqué un primer plano que pudiera ayudar a complementar esas líneas y crear un punto de partida para el espectador. Al encontrar mi composición final estaba mareado pero también concentrado, ya que he arruinado más tomas de las que me gustaría admitir. Al no ser un fotógrafo a tiempo completo y tener la capacidad de fotografiar un lugar una y otra vez, siempre he tenido que contar con un poco de suerte.
Equipo y configuración
Tengo una configuración bastante simple, trípode, cámara, lente y un disparador remoto. Solía usar filtros, pero los he dejado de usar recientemente por más espacio en mi bolso para un dron. Llevaba mi trípode Gitzo Mountaineering, mi α7R III y mi lente Sony 16-35mm f/2.8 G Master montado en él para esta toma. Soy un gran fanático del gran angular, y este lente me permite hacerlo sin demasiada distorsión. Debido al rango dinámico de luz en esta escena, necesitaba crear algunas exposiciones para ayudarme a procesar mi imagen final. Mis ajustes básicos para esta imagen eran ISO 100 y f/5.6. También necesitaba capturar algunos puntos focales diferentes dentro de la escena, ya que quería mantener la imagen nítida de adelante hacia atrás. Mi tiempo de exposición osciló entre 1/8 de segundo para el cielo y 1/2 segundo para las rocas de enfrente.
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Post-Producción
Caminando de regreso al auto, me llené de emoción, ya que este fue, con mucho, uno de los mejores amaneceres que he visto, y verlo sobre un hermoso cañón espectacular fue una gran ventaja. Pasé las siguientes 12 horas conduciendo a casa armando la edición en mi cabeza y no podía esperar para comenzar a editar la imagen. Comencé el proceso seleccionando los fotogramas que necesitaba para que mi imagen fuera nítida desde el primer plano hasta el cielo. Todos estos fotogramas tenían el mismo ajuste de exposición, solo diferentes distancias focales. Luego encontré mi marco de cielo y compilé los cuadros en Photoshop. Una vez que todos los fotogramas estaban alineados, comencé a revelar las áreas de la imagen con los fotogramas más nítidos para crear la pila de enfoque. A partir de ahí trabajé mi mezcla de exposición para el cielo, creando la imagen que había visto de pie en el mirador.
Por lo general, adopto un enfoque de edición variado basado en la imagen, desde esquivar y quemar, hasta curvas y correcciones de nivel, limpieza de polvo y pulido de imágenes. Esta imagen no necesitó mucha edición. Principalmente esquivé y quemé los contornos de las paredes del cañón para ayudarlas a resaltar y crear profundidad en la imagen. Si bien tiendo a sentarme en una imagen durante un par de días preguntándome ¿me gusta?, ¿la edité demasiado?, ¿le faltó edición?, ¿vale la pena publicarla?… con esta imagen, sentí desde el principio que era especial y publicarla me emocionaba mucho.
